Crecer, crecer, crecer
Crecer, crecer, crecer
Me parece irónico que en nuestro siglo 21, dónde el conocimiento está más a nuestro alcance que nunca antes, sea también el tiempo donde la imaginación se aleje, a saltos de elefante. Cerrar los ojos e imaginar va siendo poco a poco sustituido por verdades irrefutables, y si quisiera imaginarme a Plutón como una esponja de cristal, alguien seguro me enseñaría inmediatamente las últimas fotos de la NASA. Pero: ¿sabían ustedes que estas fotos se las toma en blanco y negro, es más, que los telescopios ni siguiera tienen rollos?
Todos seguro recordamos ese primer libro que despertó en nosotros el arte de leer. Zezé, sentado en su “planta de naranja lima” me enseñó a crear mundos imaginarios. Momo y Atreyu de Michael Ende lograron que me pierda interminablemente en sus hojas, y un poco más lejanos pero aún inspiradores fueron Tom Sawyer y Huckleberry Finn, hasta que por arte de Garcia Márquez, una : “Crónica de una muerte anunciada” me atrapó irreversiblemente en el arte de perderse en un libro.
Crecemos y los hombres grises – los ladrones de tiempo de Momo- han sido reales. Cada día es más difícil encontrar minutos para alimentar nuestra creatividad: leer, construir, jugar imaginar soñar y explorar. Creemos en los dogmas que nos prohiben todas estas actividades, cual si fuesen pecados permitidos únicamente a l@s niñ@s. Y así, dejamos de crear. Y esa falta de imaginación vuelve realidad la otra pesadilla de Ende: ese vortex negro que acaba con el mundo de la fantasía. El fin de la historia interminable es posible que llegue en este siglo 21, a menos que cuidemos esa chispa infantil que cada uno lleva dentro.
Por eso, este año en la Fundación les invitamos a nuestro nuevo proyecto, nuestra Villa de las Artes. No pretende ser un campamento, con horarios determinados y decisiones ya establecidas. Pretende extender en el campo verde del Itchimbia tantas opciones como logremos abarcar. Para que los niños exploren su creatividad en un espacio seguro, y de esa manera tengan pistas para dejarse maravillar por lo que les guste: una invitación a rescatar el derecho a la aventura. Para que los jóvenes se sientan seguros y no juzgados en su fragilidad, en una sociedad en que absurdamente les va enseñando a no sentir. Para que los adultos recuerden la importancia de jugar de imaginar y de creer que corriendo, picando tres veces y con un salto, uno puede volar; que aguantando la respiración somos invisibles, y que nuestra mente puede mover cosas si realmente lo creemos.
Esta es nuestra invitación a guardar las trampas digitales, soltarse de las redes sociales y venir a explorar en vivo y en directo, no a través de una pantalla. En 3D! Porque son las cosas innecesarias las que realmente nos alimentan, y “perder el tiempo” explorando quienes somos y encontrando pistas de que queremos es un derecho irrefutable. Por eso, y para eso, los esperamos.
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Agosto, 2015
Lo que hacemos
Lo que Hacemos
Nos han educado de tal manera que nos aceptamos responsables de lo que haceos. Firmar peticiones y sentir que somos parte de una solución es la manera más cómoda de lavar nuestras manos y borrar nuestras culpas. Mandamos promociones y oraciones en cadena copiando y pegando sin cuestionar las razones o la veracidad de las de las cadenas. Mientras escribo esto , hoy 23 de noviembre 2016, la plataforma www.change.org se jacta de tener 171,335,634 personas actuando a nivel mundial en el cambio social. Falso. Se recogen firmas, y al completar las meta de firmas publican orgullosamente: meta lograda. Con una palmadita cibernética en la espalda te convencen diciendo: tu voz importa. Falso. Los cambios se consiguen actuando, no formando.
EI mundo entero mira con horror al norte. Un grupo se queja y no termina de entender el presidente electo, y salen a las calles a demandar cambio. Mientras tanto, una mayoría enorme no se comprometió a un acto tan pequeño como votar y así, el mundo entero digiere un líder elegido por una absoluta minoría. Porque no se registraron a tiempo. Porque había largas filas. Porque pensaron que no hacía falta. Porque no asumen parte del problema, y no se entienden parte de la solución.
Nos llenan de números y los compramos. Y el mundo se relajó mientras todo cambió. Porque los medios nos aseguraban las verdades que queríamos reales y no actuamos. Porque firmamos las peticiones que queríamos reales y no actuamos. Porque hace un buen rato que no sudamos en una marcha. No actuamos. Porque mientras pensamos en todo lo que debe cambiar, y sabemos que no somos parte del problema, no actuamos y aceptamos escándalos que ya olvidamos.
En su momento teníamos un presidente que lideró un cambio que una mayoría buscaba. Porque somos parte de esa mayoría, y es necesario sentirse orgulloso de ese momento histórico en que nuestro país buscó el cambio. Pero el momento que recordamos algunos escándalos y terminamos en una jueza que grita, si queremos ver su poder seguimos juzgando cómodamente de un lado y pasamos memes, sin aceptar que es real. Volvemos el escándalo en otro capítulo de esta comedia… ese momento debemos sabernos parte del problema. Et dicho aquel que afirma que los pueblos tienen los gobernantes que se merecen es cierto. Aceptarse parte del problema, y no de la solución: creo que es el principio que necesito entender. Somos igual de responsables por lo que hacemos y lo que no hacemos.
¿Qué no hemos hecho últimamente?
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Diciembre, 2016
Vivimos...
Vivimos...
Vivimos momentos oscuros que buscan ratitos de esperanza para que pare este insoportable eco constante que canta “por favor paren el mundo nos queremos bajar”. Esta luz se encuentra muchas veces en momentos inesperados, ligeros y transparentes. La ternura. La risa. Un abrazo.
En tiempos oscuros buscamos en los artistas, esos intérpretes que intrigan, nuevas preguntas. Flotar en la profundidad de sus reflexiones para buscar nuestras propias respuestas, conclusiones o sensaciones. Porque pensar que hay una sola interpretación correcta es lo que ha asustado a la gente de las artes y los teatros: nunca faltará un petulante que exponga categóricamente el verdadero significado de una obra.
Significados habrá tantos como personas en su momento: las posibilidades son infinitas. Hoy dejo aquí un misterio, para bailar sin miedo entre sus sombras. Porque hay veces que la respuesta al momento confuso es tan simple como no tenerle miedo y navegarlo hasta que algo o alguien nos muestre una luz nueva…
Soneto 43. William Sheakespeare, 1609.
Y dos ejemplos de traducciones, que nos demuestra que a un poema habrá tantas interpretaciones como lectores, y ninguna de ellas verdadera…
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Octubre, 2016
¡Cerramos los Miserables!
¡Cerramos los Miserables!
¡Cerramos Los Miserables!… Doscientas personas y pico moviendose al mismo tiempo, más de quinientos vestuarios, dos años de trabajo y concepción, un año de producción, seis meses de preparación musical, dos meses de preparación coral, seis semanas de ensayos escénicos, dos semanas de ensayos orquestales, una semana técnica, dos ensayos generales abiertos al público y, finalmente, cuatro funciones agotadas.
Lo que el público ve: luces, vestuario, escenografía, solistas y coros. Lo que ve sin necesariamente percibir la relevancia de su trabajo: nuestro Director Musical, los músicos de la orquesta en la fosa, las pianistas acompañantes y los técnicos, aquellos héroes esenciales para sostener el ritmo de esta obra.
El secreto mejor guardado: la Directora Coral que preparó a los cantantes en un intenso trabajo por perfeccionar musicalmente su afinación y dicción para empezar a matizar escénicamente el montaje.
A quienes aplaudimos sin conocer o entender por qué: los diseñadores de escenografía, vestuario, luces, sonido, maquillaje y peluquería, comúnmente reconocidos como “los pingüinos”, por su elegante entrada en frac al final de la obra.
Y tos grandes oficios invisibles sin cuyo apoyo y trabajo nada hubiese sido posible: los asistentes de dirección y jefes de piso, los sonidistas, los tramoyistas, los realizadores, los utileros, los soldadores, los pintores, los carpinteros, los productores, los administrativos, los financieros, los asesores legales, el departamento de comunicación con su campaña de diseño gráfico, audiovisual, relaciones públicas, marketing y fotografía, los choferes, el personal de seguridad, limpieza y logística, además de todas las personas que se involucraron en este montaje de una u otra generosa forma.
Sacar adelante una producción de este tamaño requiere de el compromiso de muchos y la satisfacción es inmensa mientras escribo estas lineas, a pocas horas de abrir las puertas para el estreno, con casa llena y boletos absolutamente agotados para todas las funciones, realidad que no deja de ser una profunda sorpresa y que nos obliga a seguir arriesgando y asumiendo retos.
Es maravilloso sentir el respaldo de un público que llega a ver una producción nacional. Porque si el público no llega, el artista no crea. Pedir cultura es fácil, pero hacerla es un proceso difícil con un sistema que parece oponerse a la creación. No existe una ley de cultura. No existe un sólido apoyo al artista que incentive la presentación o la exportación de un producto nacional. Tenemos un hueco vergonzoso que la ley ecuatoriana no atiende y que los artistas esperan, aunque deberíamos demandar.
Asistir a obras de alto riesgo y vuelo como Guodual, la primera creación de circo ecuatoriana comisionada por e[ Teatro Sánchez Aguilar, en Guayaquil y encontrar un teatro absurdamente vacío es una patada que asusta a quienes sueñan y financian, y corta las alas de quienes crean. Por todo esto empiezo julio no solo con ganas de descansar, sino con un agradecimiento infinito a todos aquellos que aportaron a una nueva producción de ta FTNS y también a Quito y a sus residentes, por venir a verla. ¡Continuamos soñando gracias a Ustedes!
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Julio, 2016
Compra tus entradas y ¡APOYANOS!
Compra tus entradas y ¡APOYANOS!
Quisiera poder escribir de nuevo de sueños o ideales. Pero no es el momento. Es tiempo de pedir apoyo para esta Fundación, pues al momento esta casa no alcanzará a cumplir sus metas del 2016, a menos que reciba el respaldo de quienes nos han acompañado en nuestros espacios y eventos. No pedimos donaciones: pedimos que tu apoyo sea la compra de las entradas para nuestros eventos de junio. Llenar el aforo este mes nos permitirá mantener la programación que hemos armado. Se vuelve imposible hacerlo de otra manera, así que es tiempo de sacudir la pereza y venir a apoyarnos…
¿Disfrutaste Joyce DiDonato o Daniel Hope? ¿Los eventos del Festival Internacional de Música Sacra? ¿Te gusta la música clásica? ¿El chelo como instrumento? ¿Los nuevos grandes virtuosos del mundo? Acompáñanos el 2 de junio y goza de Leonard Elschenbroich y Alexei Grynuk: compra tus entradas y apóyanos.
¿Buscas eventos para toda la familia? E[ disco ganador del Grammy Latino llega a nuestro teatro con la maravillosa Marta Gómez, el domingo 5 de junio, a medio día. Planea tu visita con toda la familia, disfruta del Centro Histórico en la magia de sus domingos sin ruido y tráfico: compra tus entradas y apóyanos.
¿Aún recuerdas nuestro Faust, Despertares, La Rondine, West Side Story, Luisa Fernanda o Sweeney Todd? Contra viento y marea llegamos a nuestro escenario con una versión propia de Los Miserables, el maravilloso musical basado en la increíble obra de Victor Hugo, que demuestra traspasar la historia y mantenerse vigente: Tenemos cuatro funciones para que vengas: del 23 al 26 de junio: Compara tus entradas y apóyanos.
¿Has disfrutado de nuestros programas? ¿Festival Ecuador Jazz? ¿Festival Internacional de Música Sacra? ¿Escenario Joven? ¿Cine en los Barrios? ¿Clases magistrales o conferencias? ¿Puertas abiertas para conocer a los artistas que nos visitan? ¿Teatro, música o danza en nuestros espacios? ¿la Orquesta de Instrumentos Andinos, la Banda Sinfónica Metropolitana de Quito? ¿E[ Ensamble de Guitarras, el Coro Mixto Ciudad de Quito, el Coro Juvenil o el Coro Infantil de [a Fundación? ¿La Escueta Lírica? ¿El Grupo Yavirac o Voz Mestiza? ¿Nuestro Sucre Viajero? ¡compra tu entrada y apóyanos!
Apoyarnos es fácil, y al momento es necesario. La linea generosa que ha mantenido la Fundación estos últimos años, manteniendo nuestros espectáculos alcanzables con descuentos siempre, además del descuento para estudiantes, es posible solo si contamos con la contraparte: que se llenen los teatros.
Junio marcará lo que será la Fundación el siguiente semestre: necesitamos tu apoyo para seguir. ¿Compras tu entrada?
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Junio, 2016
A pesar de...
A pesar de...
Me alucina la resiliencia humana. Esa capacidad de crear a pesar de estar rodeados de una raza que demuestra ser el parásito que está acabando el planeta. La capacidad de soñar. De imaginar y alcanzar metas reales o no reales, a pesar de que no sean importantes. Empiezo a entender que nuestro futuro está en nuestras manos, a pesar de que son otros los que toman las decisiones. Es en las cosas pequeñas donde reside lo importante, y no me canso de repetirlo, a pesar de que este no es el primer editorial que habla de esto.
Les invito a vivir los productos de la creación humana. La experiencia cultural es un triángulo, y la audiencia es necesaria: creador-productor-audiencia. Lo importante es entender que al final de la vivencia, la audiencia es parte creativa de esta línea que termina siendo un punto, pues es una vivencia sincrónica de estas tres partes.
Llega Agosto, verano de las artes! Una ciudad cambia cuando valora lo que tiene, y este mes desfilan un sin fin de propuestas de todos los géneros y en todos los territorios, pues es certero que una gran cantidad de audiencia tiene tiempo entre sus manos: vacaciones! Se anuncia ya el nuevo Festival de la Luz. El Itchimbía recibe música de todos los gustos, teatro, danza. Siempre hay artistas callejeros. Quito Turismo aporta con un nuevo encuentro gastronómico con su Sal Quiteña. Todas las instituciones de el municipio se alinean para ofrecer a los quiteños una razón de salir y recordar por qué nuestra capital es una de las más visitadas cada año.
Vivan el tiempo, no lo maten! A pesar de que nos han vendido esta idea absurda del capitalismo y como alienígenas llenamos los centros comerciales para tener cosas a pesar de no necesitarlas. Apaguen los celulares y olvídenlos en casa. Encontrarán que tienen más recuerdos a pesar de no tener selfies. Más amigos a pesar de no tener los innumerables “me gusta”. Les puedo asegurar que cada evento vivido y compartido en un teatro, en un concierto, en un museo, en la calle… a pesar de no tener precio, son las joyas que les queda adentro, y no hay ladrón que pueda robarlas.
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Agosto, 2017
No por el día del maestro
No por el día del maestro
La necesidad de querer y abrazar ha sido secuestrada por Hallmark y su invasión de tarjetas. Ahorramos tiempo y ni siquiera escribimos una pequeña nota dentro. Agradecer se ha vuelto una obligación, y no un sentimiento. Los hombres grises que Momo batalló han ganado la batalla: nos han robado el tiempo que disfrutábamos visitando a personas que nos han marcado, a nuestros mentores. Erradamente pensamos que el tiempo guardado lo podremos utilizar. Falso. “Tan segura está la muerte de su mano, que nos da la vida de ventaja”. Y en ese juego absurdo llamado vida, atesoramos cual comodín la carta del tiempo y nos sorprendemos con dolor cuando acaba el juego y nos queda el tiempo en la mano.
Hoy quiero por eso rendir, aunque tarde, homenaje a tres maestras espectaculares que me enseñaron a preguntar constantemente y además a dudar de las respuestas, maestras determinadas a regalarnos generosamente su conocimiento y orgullosas de vernos avanzar sin la inseguridad de quienes quieren siempre mantenerse arriba o adelante. Maestras que me empujaron a ser osada, irreverente y aventurera, pero no aceptaban la arrogancia y peor aún la vagancia. Hoy recuerdo a tres mujeres que me inspiran.
Recordar a Celia Zaldumbide evoca el temor de la primera impresión que sentías al conocerla. Sin embargo, ese miedo desaparecía para siempre cuando lograbas ver y entrar en su camuflado y tierno corazón de madre. Hoy llegan de todo el mundo varios de sus hijos a rendirle homenaje póstumo, pues no aceptó nunca nada en vida. Sus pianos cerrados seguro lloran aun su ausencia; y sus perros y nosotros extrañaremos siempre las mágicas tardes de whiskey y lo mejor de la música.
A Sandra Bernhard la secuestró un cáncer demasiado pronto y con su muerte saltaron cientos de epitafios y homenajes que demostraron que esa sensación de cercanía y amistad eran su talento. La lloramos muchos y el tiempo no borrará jamás ni su legado ni su risa.
Con estas dos lecciones: abrazar a la señora Keyes, mi maestra, quien me enamoró de la música, y el piano, que es un regalo que aún me da esta vida y lo tomo sin vergüenza cada vez que puedo robarle tiempo al tiempo. Porque la vida es mezquina y nos da una sola vida para vivirla y agradecer es lo mínimo que puedo hacer. Y que se ofenda Hallmark: no es un deber, es un derecho. A Celia Zaldumbide (1926- 2014), Sandra Bernhard (1955-2015) y la señora Keyes, quien espero llegue a los 100.
Chía Patiño, Directora Artística Ejecutiva
Julio, 2015
Abjurar... Despertares
Abjurar... Despertares
Frank Wedekind nació en Alemania en 1864. Vivió la época que le tocó vivir de una manera honesta, aunque ésta pueda ser cuestionada, pero se mantuvo fiel a sí mismo. Fue un ciudadano del mundo, temporalmente americano, permanentemente alemán una vez que debió sacar un pasaporte. Vivió la mayor parte de su vida en una Alemania a la cual cuestionó, como cuestionó sus valores, y esta crítica se encuentra en sus poemas satíricos y posteriormente en su dramaturgia. En 1898 sus poemas publicados en la histórica revista Simplicissimus determinó que él junto con el caricaturista Heine acaben en la cárcel debido a que el Keiser Wilhelm se sintió ridiculizado en la portada de la misma. Salió nueve meses más tarde. Dejó de escribir poesía y se dedicó al teatro. Pero su voz, su opinión y sus cuestionamientos no cambiaron. Se mantuvo crítico a una sociedad burguesa y en esa búsqueda es quien abre las puertas al expresionismo y al teatro épico.
Mantenerse honesto. Nuestro nuevo festival de teatro busca celebrar las voces honestas. Esta Fiesta Escénica presenta obras que nos invitan a cuestionar. Obras desnudas cuyo centro son las palabras y las historias; cuya fuerza radica no en el seductor espectáculo sino en la profundidad de su mensaje: la fuerza de la dramaturgia honesta.
Ser fiel a uno mismo. Otra de tantas frases trilladas, que de tanto oírla hemos olvidado su importancia. Hacer lo que podemos. Pero hacerlo. Arriesgarnos a hablar aun cuando frente a nosotros se encuentre la inquisición.
Cuando Ptolomeo manifestó en su visión geocéntrica del Universo, que la tierra (entonces plana) estaba inmóvil, y que el sol y los planetas giraban alrededor de ella, la iglesia – entonces intocable- aceptó esta teoría y así fue: nuestro insignificante planeta pretendió ser en el año 130 el centro del Universo.
En 1593 Copérnico a través de una serie de observaciones desafía esta visión, y propone algo descabellado: la tierra y los otros planetas giraban alrededor del sol. Sin embargo esta visión heliocéntrica se mantiene camuflada y es conocida únicamente en pequeños círculos eruditos.
Cuando a principios del siglo XVII Galileo desafía a la iglesia y apoya la teoría de Copérnico, la iglesia condena mediante decreto lo que ahora sabemos es una verdad. El Papa Urbano manda a llamar a Galileo quien rechazar ante los jueces y de manera pública, su teoría, pero se dice que al retirarse de la sala dijo entre dientes “Eppur si muove”… “Y sin embargo, se mueve”. Galileo tuvo que retractarse: podemos imaginarlo anciano, enfermo pero no asustado: cuando en 1981 el Vaticano desclasificó los archivos del caso Galileo, en un papel está escrito “estoy en vuestras manos; haced conmigo lo que os plazca.” Galileo no fue condenado a muerte, pero se lo confinó por el resto de su vida… y sin embargo, habló.
… y sin embargo, se mueve. Porque hay verdades innegables, aunque deban ser dichas entre dientes. Presentamos a Quito nuestro nuevo Festival que esperemos llene un espacio que nos vienen pidiendo un buen momento. Presentamos propuestas honestas y válidas, que hablan de frente de lo que hoy mismo es necesario hablar…
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Septiembre, 2015
Nosotros los Quiteños
Nosotros los Quiteños
El hito de Quito es ito; por eso en Quito todo es chiquito. Donde ni siquiera el uno es completito sino unito. Por que no sea malito, y hágame un favorcito: será buenito… De pasito en pasito avance un poquito.
Pero esa dulzura intrínseca de los quiteñitos esconde la fortaleza inesperada de los Quitus-Caras, de quienes dieron el primer grito de la independencia, y quienes consiguieron que nuestra ciudad sea conocida como Quito, Luz de América.
El quiteño es dulce, pero en apenas un instante encuentra la fuerza y la conciencia de entender lo que ya conoce, y apuntar a lo que en el fondo quiere. El quiteño es creativo y recursivo, luchador persistente y emprendedor. No nos vencemos fácilmente. En el mundo son pocas las ciudades que se asientan en las faldas de los volcanes a la altura de las nubes. Requiere gente especial para decidir ese espacio para plantar los sueños. En estos tiempos de falsos profetas, de dioses de barros, es imperante meditar, entender o recordar quienes somos, que queremos y a dónde vamos. Que nuestras raíces no son las trincheras, sino la batalla abierta y honesta, cara a cara al enemigo. Que el quiteño no se achico-pala. Que entendemos que tener miedo es natural, pero ser cobarde es una opción.
“Llamarse jefe y no serlo es el colmo de la miseria” dijo alguna vez Bolívar. Me parece adecuado meditar este mes en lo sacro, en lo realmente trascendente. Fortalecernos para adentro. Entendernos y encontrarnos dentro nuestro espacito, para mantenernos además fuertes hacia fuera. Un quiteño no es unito, es un ejército, y cada quiteño contiene un batallón que transforma su quiteñito en dueño de sus valores, espacios y futuro.
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Marzo, 2015
¡¡¡VAQACIONES!!!
¡¡¡VAQACIONES!!!
El verano llegó. VAQaciones. Ya de adultos, recordamos con nostalgia esa época que parecía o muy corta o interminable, un espacio para maravillarnos o aburrirnos -dependiendo muchas veces de nuestros padres… Una época en que teníamos tiempo, o una oportunidad desperdiciada.
Los frutos de las VAQaciones son cosecha de iniciativas propias y alimentan quienes somos: juegos simples como las escondidas, policías y ladrones, batallas entre superhéroes. O ser algún personaje como astronautas, estrellas de fútbol o VAQueros requieren únicamente de eso: nuestra imaginación. Le siguen hacer y volar cometas, competencias de barcos de papel, jugar a las bolitas o salir a encontrar frutas cada vez menos encontradas en la ciudad: taxos, capulíes y uvillas. La nostalgia que alimenta nuestras memorias, y la capacidad de imaginar son resultado directo de nuestras vivencias.
¿Cómo se alimenta la imaginación? Es aquí donde la cultura en todas sus manifestaciones toma una importancia esencial. Podemos imaginar tan lejos como hayamos explorado. Entendemos nuestra identidad tan profundo como la hayamos vivido. Entendemos nuestro Quito solo en cuanto lo hemos conocido.
La iniciativa del Alcalde Mauricio Rodas, creada y puesta en valor por su Secretaría de Cultura en articulación con sectores ciudadanos y otras instancias municipales abre una enorme puerta a la posibilidad de multiplicar nuestras vivencias. Es un regalo que debemos aceptar y vivir. Es una oportunidad.
Para los padres, una fuente enorme de alimentación intangible, además de dar un respiro necesario a la energía inacabable de los niños encerrados en casa. Para las familias, un espacio para explorar y compartir, generando los lazos necesarios para mantener la unidad de una familia sana. Para todos, el espacio para vivir y preguntar: utilizar cada evento para conocer y conocernos más, para empujar las fronteras de nuestra imaginación.
El VAQ invade Quito en nuestras VAQaciones andinas en el mejor sentido de la palabra. Explorarlo es responsabilidad nuestra, como al final lo es todo: las VAQaciones son así una oportunidad de crecer, o de aburrirnos. ¿Cuál eliges tú?
Chía Patiño, Directora Artística – Ejecutiva
Agosto, 2014